Para un científico una de las cosas más valiosas del trabajo en el laboratorio son los resultados, sin embargo, los aciertos o errores en el laboratorio van más allá de la pericia del investigador o analista. La estandarización de la técnica, los equipos de laboratorio y reactivos utilizados son factores que pueden garantizar el éxito o el fracaso de una investigación o trabajo profesional. Por sencillo que parezca, una mala decisión en estas variables puede terminar fácilmente con miles o millones de pesos invertidos o lo que es peor con años de esfuerzo.
Cuando se seleccionan las herramientas, reactivos y equipos para llevar a cabo una investigación o análisis, se toman en cuenta características ajenas a la labor científica, tales como, marcas, tiempo de entrega, manejo de los insumos, costo y calidad, entre otros, ¿todo esto puede afectar los resultados de una investigación?
¿La calidad de los resultados está realmente ligada a un proveedor de equipos de laboratorio e insumos?
Cuando el departamento de compras o el investigador realiza un pedido, pueden verse influenciados por el precio de cada producto, la frase “lo barato sale caro” no podría ser mejor aplicada a los procesos de un laboratorio, es por ello que la elección de los materiales y equipos es una actividad crítica. En ocasiones los encargados de compras de un laboratorio toman opciones más económicas en el “mercado alternativo” y contratan los servicios de distribuidores no autorizados que utilizan técnicas como el “cajuelazo” para ingresar artículos importados al país. Pero, ¿qué tan seguro son estas prácticas?
Sin duda puede ser más económico realizar transacciones con distribuidores no autorizados, pero los riesgos son muchos, el primero y fundamental, es que no hay garantía del servicio, si por alguna razón el producto pedido falla o está en mal estado, ¡no hay como reclamar! y entonces ahí lo que era “económico” resultó ser la peor opción de compra.
Con un proveedor autorizado se tiene la seguridad de soporte y garantía de los artículos entregados, servicio postventa y asesoramiento científico, de cierta manera este se convierte en un socio del investigador o la empresa al comprometerse en entregar productos de calidad que satisfagan las exigencias del cliente y por ende se elevan las posibilidades de éxito y los buenos resultados en el laboratorio.
En la labor científica el valor de un reactivo o equipo es algo que no tiene precio y un proveedor autorizado no es sólo un vendedor, es un aliado que se preocupa y le interesa su investigación y sus resultados.